El título es obvio. No es necesario explicarlo. Sin embargo en el mundo actual, hay que remarcarlo. Hay que tomar conciencia de ello, especialmente en los contenidos difundidos por dichos medios. Si bien desde hace un tiempo vemos la importancia cada vez mayor de las denominadas “redes sociales” a través de otro medio, con otras características, INTERNET, muy valioso por cierto, esto no nos tiene que hacer olvidar que la “base de sustentación” es el concepto internacional de la “radiodifusión” generado en el año 1920.
Fue primero el servicio de la Radio y más tarde el de la TV, ambos, de carácter abierto, directo y gratuito al público en general que, a partir de su propia identidad, siempre difundió, en forma “masiva”, un cierto contenido, que actualmente está interactuando con otros servicios, ya mencionados, que poseen otras características.
Por supuesto, lo anterior es otra obviedad. Pero de ello se deduce la responsabilidad de dichos medios. En ese sentido, depende mucho de las personas y entidades que intervienen en ellos, ya que es una especie de “escuela” moderna a donde la tele-audiencia asiste regular y masivamente, por lo cual siempre tiene influencia, ya sea en forma directa o indirecta, en toda la sociedad.
Ocurre que, como en todo medio de comunicación, en el caso de la TV ABIERTA cada uno de sus servicios brindados posee su propia “línea editorial” que recae, en ese caso, en los respectivos titulares responsables de los mismos, máxime si tienen personerías jurídicas públicas, estatales o no estatales, ya que estas últimas tienen mayores responsabilidades ante la sociedad.
En este último aspecto, cada uno de los titulares de los servicios de TV ABIERTA localizados en el área de Buenos Aires, los canales 2, 7, 9, 11, 13 y 21, poseen en mayor o menor medida responsabilidades indelegables por la gran importancia e influencia que tienen en la sociedad.
Fuente: Telemisión
Buenos Aires, 01 de Julio de 2016
