La Iglesia Católica, como Institución de Carácter Público en la Argentina tiene el derecho de utilizar, ahora y en el futuro, todo el espacio radioeléctrico completo de frecuencias, otorgado en el año 2001 con una autorización dada por el Decreto del P.E.N.1314 para el canal 21 de TV ABIERTA al público en general, máxime en esta época mediática y de emergencia con la pandemia actual, donde se necesita una mayor presencia en los medios del AMBA a fin de llegar a todos incluyendo a los más vulnerables, por lo directo y gratuito de un sistema abierto al público en general que tiene autorización desde ese año.
Sin embargo, a partir de la Resolución ENACOM 1631 del año 2017, que recientemente ha sido implementada en la práctica, a través del transmisor y antena de ALFA TV (señal digital 21.1) que “transporta” la señal digital 21.2 del Canal Orbe 21, se vislumbra públicamente que se ha deslizado un error aparentemente no advertido respecto al mismo, el denominado “Canal del Papa”.
Lamentablemente, desde el punto de vista de una asignación en el espectro electromagnético en el zona del AMBA, se le ha quitado la titularidad a esa Institución Pública de la porción de frecuencias ya autorizada desde ese año 2001 (6 MHz. de ancho de banda) y se la ha reemplazado por otro titular de Carácter Privado (ALFA TV señal digital 21.1), quitándole así también la consiguiente libertad de expresión para su desarrollo futuro y una independencia muy necesaria, con una evidente inequidad actual frente al resto de los canales y señales digitales, abiertos en esa misma zona del AMBA, que por lo menos poseen transmisor propio y antena.
De acuerdo a la Normativa nacional (ENACOM), e internacional (UIT) en lo que se refiere a la asignación de frecuencias por canal completo de 6 MHz. de ancho de banda, se podría arribar a un acuerdo de tal manera que las señales digitales o “subcanales” ALFA TV (21.1), BRAVO TV (27.1) y NET TV (27.2), que son afines (como se conoce públicamente), queden en el mismo canal radioeléctrico 27 con transmisor y antena propios de la empresa privada que los habría implementado en California 2715, en la zona de Barracas de la Capital Federal.
Así se evitaría la necesidad de ocupar un “terreno ajeno” (es decir, el canal radioeléctrico 21) con la actual señal digital 21.1, que ocupa mayormente ese “terreno”, otorgado muy anteriormente a la Iglesia Católica.
Para ello, en ese canal se tendría que seguir emitiendo desde el Seminario Metropolitano, en Villa Devoto de la Capital Federal, con lo que es más importante: el transmisor y antena propios de la Institución (como lo ha sido desde el comienzo, que emitía en analógico), a fin de emitir ahora en digital, a partir de dicho acuerdo entre las autoridades respectivas.
De esa manera, sólo así se podría utilizar ese espacio completo para un desarrollo futuro, con el sistema digital, a través de dicho transmisor y antena propios que generan ese canal radioeléctrico 21.
Fuente: Telemisión21
Buenos Aires, 24 de junio de 2020
